A
ver raza: ayer publiqué un post sobre lo desbordado multitudinario y excesivo
que se ha vuelto todo en Baja California. Mi texto generó algunas reacciones y
bueno, yo creo que el embrujo de la escritura es que cada quien le da la
interpretación que quiere y eso se respeta. Sin embargo, me gustaría
puntualizar o dejar claras algunas cosas.
La
primera, es que con todo su caos a cuestas, Baja California es, desde mi punto
de vista, el mejor lugar de todo México para vivir. Al menos yo no lo cambiaría
por ninguna otra entidad.
He
viajado por toda la República y por 22 diferentes países, he vivido en otras
ciudades y puedo afirmar con objetividad y conocimiento de causa, que yo elijo
Baja California por encima de cualquier otro lugar de México.
Por
ejemplo, nací y viví la primera parte de mi vida en Monterrey, y aunque le
tengo cariño a mi tierra natal, a la hora de elegir y poner en la balanza, yo
elijo una y mil veces a Baja California por encima de Nuevo León. Lo que más
extraño de tierras regias es sobre todo la cultura futbolera y el poder ver
jugar a mis Tigres cada 15 días. Extraño sus montañas, en especial la Huasteca y
el Sol poniéndose tras las Mitras; extraño cierta forma de preparar la carne
asada, pero como lugar para vivir y tener un hogar yo prefiero a Baja
California.
También
viví casi cuatro años en la Ciudad de México y hasta hace poco solía viajar ahí
con cierta frecuencia y por lo que a esa urbe respecta no tengo ninguna duda:
elijo un millón de veces a Baja California por encima del Chilango. La capital
está muy bien para ir de paseo unos días (de preferencia pocos) recorrer sus
librerías (el único punto en que nos superan) ir a algún concierto y párale de
contar. Cuando viví ahí fui muy feliz, pero eran otros tiempos (88-92). Me
costaría horrores volver a habitar en esa ciudad y me cuesta trabajo creer que
haya gente que pueda ser tan feliz ahí, pero en este mundo, por fortuna, hay
millones de rotos para millones de descocidos.
En
mi caso no hay medias tintas ni titubeos: yo creo que Baja California es el
mejor sitio posible en México. Tal vez mi plan B, si tuviera que elegir otro
lugar para vivir, sería Baja California Sur.
Ayer
escribí que todo se ha desbordado y se ha vuelto excesivo en Baja California y
eso es cierto. Genera inconvenientes, sí, pero piensen que si hay un kilómetro
de fila en la caseta de Capufe en Playas de Tijuana, es porque nos siguen
visitando decenas de miles de turistas. Si ves cientos de construcciones por
toda la ciudad y un montón de restaurantes caros a reventar, es porque la
economía, pese a todo, fluye y el dinero se mueve. Si hordas de sureños siguen
llegando, es porque pese a lo que digan, aquí se vive mucho mejor que en el
Centro y Sur de México. Mal que bien, somos el corazón del corredor
macro-económico binacional más grande de América.
Claro,
los riesgos son muchísimos, pues la región se nos está desbordando y puede
colapsar. Urge impulsar una planeación ordenada a mediano y largo plazo, dejar
de apostar por aspirinas y remedios temporales y unir esfuerzos en pro de las
ciudades que les heredaremos a nuestros nietos en 2050. El programa Respira,
que impulsa el actual Gobierno del Estado, despierta mi esperanza.
Baja
California es insegura y por desgracia lo seguirá siendo, porque por nuestra
posición geográfica estamos condenados a ser la joya de la corona de casi
cualquier negocio ilícito, pero aunque las estadísticas sean escandalosas sobre
todo en lo que se refiere a homicidios, creo que como ciudadano vives mucho más
inseguro y con mucho más miedo en estados como Guerrero, Tamaulipas, Michoacán,
Morelos o el EdoMex.
Pero
con todo su caos y su inseguridad a cuestas, mi sitio en el mundo es este brazo
de noble tierra que surgió del fondo oceánico; estos benditos 71 mil 450
kilómetros cuadrados en donde caben todos los climas y ecosistemas.
Esto
es Baja California- Casi cuatro millones de habitantes procedentes de muy
diversos rincones del país y del planeta creando un mosaico multicultural
siempre abierto al mundo.
Esto
es Baja California- Abrazada entre las aguas de dos mares; uno frío e
impetuoso, otro cálido y sereno.
Esto
es Baja California- Tierra de oportunidades e innovación; de dinamismo y fuerza
de voluntad; siete municipios, cada uno con su esencia y vocación, con uno de
los índices de desarrollo humano más elevados de México; una joven entidad
ubicada en la esquina noroccidental del país, ventana al Lejano Oriente y
puerta de entrada a la economía estadounidense
Esto
es Baja California- Una península que por millones de años fue fondo marino y
emergió de las aguas del Pacífico. “Doncella que surge del mar”, reza el Canto
a Baja California en alusión a la que es considerada una de las formaciones
geológicas más jóvenes de la Tierra.
Esto
es Baja California - Un caleidoscopio de ecosistemas en donde la montaña nevada
no está muy lejos del arenoso desierto y donde el silencio bajo la noche
estrellada en una playa solitaria antecede al neón de la iluminada noche
urbana.
Somos
muchos los que llegamos de paso y nos quedamos aquí para siempre, porque una
vez que conozcas la Baja California profunda corres el riesgo de no querer irte
nunca.
Caminamos
por ardientes desiertos y sierras nevadas.
Nadamos
entre las olas más salvajes y las tibias aguas de un spa natural en medio del
desierto.
Brindamos
con el mejor vino de México
Comemos
lo mejor de nuestro mar y nuestra tierra fusionado en la cocina Baja- Med.
Nos
fundimos en el silencio de La Rumorosa y en el loop eterno de la noche
tijuanense.
Baja
California es diversidad
Baja
California es innovación
Baja
California es magia
Baja
California es inspiración
Cierto,
estamos hechos un canijo caos, pero es este mi caos favorito.