Eterno Retorno

Friday, January 08, 2021

Escapados de la red duermevelera

 


Frío y nublado amanecer. Al parecer el invierno empieza a decir presente después de semanas o meses de aliento santaanero. En los tiempos del arresto domiciliario cuesta distinguir un día del  otro. Después de calentar el primer café del día (el primero de una larga marcha que se extenderá hasta el mediodía) procedes a garabatear tu diario atrapasueños. Tu nuevo cataclismo caligráfico es un cuaderno delgadito y cuadriculado cuya portada es un planisferio de 1897. La particularidad de este nuevo proyecto, iniciado al momento de arrancar la cuarentena en marzo de 2020, es que en este cuaderno te limitas a anotar los sueños. Nada del  mundo real, diría Fito Páez. La nueva versión de tu diario se limita a los territorios de lo onírico. Lo llamas tu red duermevelera, el equivalente a un gran palangre arrojado por la noche con la ilusión de atrapar a cuanta bestia more en las profundidades del subconsciente. Casi siempre pepenas algo, pues rara es la noche vacía, pero lo transformado en garabato es apenas vestigio y morusa, pedacitos de algo descomunal esfumado al despertar. Al amanecer, tu tejido neuronal es la arena aún mojada por la marea alta del subconsciente que la cubrió por completo durante el sueño profundo. Del océano en retirada apenas quedan restos e intuiciones, pero con eso te basta para ir tejiendo tu red.

Hoy soñabas, como tantas veces, con tareas periodísticas impostergables, una cobertura foránea en Ciudad de México. Avanzabas en bicicleta por alguna avenida de Polanco buscando a un joven político quien habría impugnado una elección en Sinaloa. Despertaste temprano y tu red duermevelera se transforma en un tercio de página.

Thursday, January 07, 2021

El Partido Trumpista y el final de la era del bipartidismo

 


Bueno ¿Y qué fregados creen ustedes que vaya a pasar con Trump en el futuro mediano e inmediato? ¿Se irá a su casa a jugar golf luego de auto perdonarse? ¿Le abrirán un proceso penal para llevarlo a un calabozo como tantos de nosotros deseamos? ¿Se preparará para volver a competir como candidato en 2024? Corren apuestas señores, pero mi pronóstico es que Trump acabará de romper con el Republicano (que ya parece empezar a darle definitivamente la espalda) y fundará su propio movimiento. Si tiene dudas, puede pedirle consejos a su buen amigo tabasqueño, quien nunca lo dejará abajo. Mejor tener su propio partido en donde funja como dueño, patriarca y sumo sacerdote sin nadie que dispute o cuestione su autoridad. Una suerte de Morena en versión redneck. Podría ser el partido M.A.G.A., el “Greatest and Strongest Party Ever”, el partido Stay Strong, el Alternative Fact, el Proud Boys Party o simple y llanamente el Partido Trumpista para acabar pronto. Llámalo como quieras. A lo mejor el 6 de enero de 2021 representó el final de la larga era bipartidista en Estados Unidos. La paradoja es que Trump, non plus ultra del despotismo materialista y el producto más burdo del capitalismo salvaje, acabaría por convertirse en un líder anti-sistema, un rebelde punk dedicado a combatir al “corrompido establishment”, representado por el Partido Demócrata, el Republicano, CNN, New York Times, Washington Post, Facebook y Twitter. A lo mejor Trump contrata a unos nerds de Silicon Valley y acaba creando su propia red social para poder prescindir de la bendición de Zuckerberg (a quien sin duda considera como un corrupto aliado de la élite política). Acaso acabe por fundar o empoderar sus propios medios de comunicación llenos de verdades alternativas y teorías de conspiración, su propio mundo dedicado a torpedear y bombardear la política estadounidense y mundial desde una trinchera en donde solo existirá su verdad y su visión del mundo. No lo echen a saco roto: en este momento, un hipotético Partido Trumpista sería incluso más poderoso que el propio Republicano (que sin duda sufrirá mucho para volver a encontrar su rumbo y su lugar en el tablero de ajedrez). Con un capital político de 70 millones de votos se puede poner un país de cabeza. Basta con que la tercera parte de esos 70 millones le siga siendo fiel y lo apoye ciegamente, lo cual no me parece improbable. Trump, al igual que su homólogo mexicano, ha sabido encarnar y hacer suya la voz, la rabia y el resentimiento de millones de ciudadanos que seguirán estando ahí, queramos o no. Estados Unidos ha cruzado un umbral en su historia. ¿Bedtime for Democracy? Veremos si los Dead Kennedys tuvieron razón.

Wednesday, January 06, 2021

 


Había una vez en América del Norte unos pobres colonos puritanos que cazaban guajolotes, vendían esclavos y colgaban brujas. Tenían una sui generis forma de interpretar la Biblia y explicar los sagrados derechos que decían tener  sobre la tierra que poblaron luego de arrebatársela a los nativos. Eran unos tipos raros estos colonos, pero allá por 1776 demostraron ser los alumnos más aventajados del Siglo de las Luces. Su Constitución, promulgada en Filadelfia en 1787, es pura encarnación del Espíritu de las Leyes de Montesquieu y la doctrina del Liberalismo Clásico de John Locke. Vaya, es la primera gran Carta Magna del mundo que llevó a la práctica los ideales de la Ilustración. Estos devoradores de pavos y cultivadores de algodón, entendieron que la división de poderes es sagrada,  que las leyes e instituciones están por encima del individuo y que la democracia es el único camino posible. “We the People”, clamaron y su ley suprema fue promulgada. Vaya, con decirles que nuestra primera Constitución Mexicana, la federalista de 1824, es una mala copia en versión católica de la gringa. Los mexicanos adoptamos el federalismo como un zapato a la fuerza (y pese a las advertencias de mi paisano Fray Servando) porque creíamos que el camino norteamericano era la ruta hacia la democracia moderna que  en México jamás pudimos vivir en plenitud.  Después Alexis de Tocqueville los puso como ejemplo en su texto clásico: “La democracia en América”. Con muchísimos bemoles y “asegunes”, con todo y sus esclavos y su guerra de Secesión, lo cierto es que estos gringos han respetado a rajatabla sus cimientos democráticos. Cierto, puritanos al fin, no pueden evitar contaminar sus instituciones de ridícula mojigatería cristiana, como sus juramentos oficiales bíblicos o sus compulsivos  “in god we trust”o “god bless América” pero lo cierto es que contra viento y marea y aún inmersos en turbulentas tinieblas, su democracia y sus instituciones son y han sido intocables.  Te pueden caer mal o te pueden resultar hipócritas, pero deberás reconocer que nunca en dos siglos y medio han caído en la tentación de entregarle el poder a un rey, a un clérigo o a un dictador que se perpetúe por décadas. Dos siglos y medio ininterrumpidos de democracia estadounidense y nunca tan amenazada como hoy en día. El alumno estrella del liberalismo ilustrado viendo cómo una caterva de descerebrados pisotea sus instituciones. ¿Mierda es lo que querían? Mierda es lo que tienen Ahí está el resultado de entregar el poder a populistas megalómanos. Luego no puedes sacarlos y no se van por las buenas.  Lo peor no es Trump, porque él, quiera o no,  ya se va al carajo en dos semanas, sino los 70 millones de “magas”  y “proud boys” armados hasta los dientes con los que el Demócrata deberá gobernar. Nunca tan polarizados y tan al borde de la guerra civil en la casa del vecino. Cause for alarm, dirían mis queridos jarcoreros de Agnostic Front. En fin: si ves las barbas del vecino cortar…



Tuesday, January 05, 2021

inventario de otredad

 

En el inventario de la otredad (ante los ojos de quien acecha con mil ojos de mosca) yo caigo irremediablemente en la casilla del extranjero.

Nadie niega la cruz de su parroquia. Nadie es capaz de renunciar al estereotipo en donde su absurda ropa y su absurda cara lo han colocado.

Inventario de naufragios escriturales 

¿Cuántas palabras he arrojado al vacío? Por un  momento tengo la certidumbre de no haber escrito nunca y acaso aquellos barcos que creyeron llegar a buen puerto no pasaron de ser buenos deseos  

¿Algún día me ha llevado a un sitio la libre asociación? 

¿Algún día he sido capaz de redondear una historia en un desvarío de aeropuerto?

Monday, January 04, 2021

Luto en Bodom

 


Cuando se muere un músico cada quien deja brotar  sus saudades y sus nostalgias. Algunos le lloran a su Manzanero, pero por lo que a mí respecta, lo que me entristece es despertar con la noticia de la muerte de Alexi Laiho. Probablemente si no eres metalero este nombre no te diga nada, pero este canijo finlandés era un guitarrista endiabladamente habilidoso, acaso el más virtuoso del metal extremo escandinavo. Bandas van y bandas vienen, pero créeme que el Hate Crew Deathroll fue uno de los mejores discos de metal en la primera década del milenio. Wildchild Laiho era una especie de discípulo de Blackmore o  Malmsteen tocando un Power-Death asesino y melódico a un mismo tiempo. Vi a Children of Bodom en San Diego en  el verano de 2006 en un festival con Slayer, Lamb of God y Mastodon . Entonces pude comprobar lo perro que estaba Alexi tocando en vivo. Un virtuosismo violento lo suyo. Cuando vi la noticia de su muerte tuve la certidumbre de que se habría suicidado, lo cual habría sido predecible para un alcohólico con antecedentes de padecimiento psiquiátricos,  pero al parecer murió de una enfermedad no especificada (seguramente del hígado). Follow de Reaper. Al final Alexi siguió a la parca.  Silent night, Bodom night.

Sunday, January 03, 2021

Impúdico azul de domingo yermo

 


Enero no renuncia a las sombras largas y al cielo ya le ha gustado esto de pasearse desnudo por el invierno.

Impúdico azul de domingo yermo, de palabrería en fuga, de espectrales libros amodorrados.

El 21 no nos ha caído así como nunca nos cayó el 20 y por ahora el año nuevo tiene esencia de vía muerta. En tres días ya pepenamos la primera comida Caesars,  hubo un par de incursiones al Oxxo-carnicería y un Blitzkrieg solidario a El Día. Ni siquiera he cedido a la hipocresía de un propósito de enmienda.

Por ahora los karatazos de Cobra Kai han sido lo más entretenido. Nunca creí encontrar semejante dosis de malicia narrativa en el postcuela de una peli ochentera. Si alguien quiere un ejemplo reciente y a la mano de personajes bien armados, ahí están mis karatekas del Valle. Hasta el momento es lo más emocionante.    Eso y perseguir sombras con la cámara, buscar con los binoculares el nido de los cuervos, reparar en lo mucho que ha pasado sin ver un solo delfín. Distinguir un barco y un avión en la lejanía, intuir los juramentos de monstruos dormidos, refundirse into the Black Hole como un Mastodonte al mediodía.