Lo de la escritura automática fue una leyenda urbana, la idealización de un compulsivo desparramadero en donde no escaseaban las faltas de ortografía y los errores de dedo. Lo cierto es que hoy el arrancador de las palabras yace empantanado. La blancura de la página en blanco nunca me había herido tanto como ahora.
Al momento de estampar firmas y huellas digitales, Walterio experimentó algo muy parecido a su primer salto en paracaídas, aunque en este caso el vértigo y el mareo devoraban al éxtasis de la adrenalina. De pronto se vio a sí mismo cayendo al vacío. Ni siquiera un tiburón del tamaño de su padre había contraído a título personal una deuda de ese tamaño, pero bastaba sumergirse en ese cuento de hadas representado en la animación computarizada y en la maqueta a escala del condominio para concluir que la apuesta valía la pena.
Saturday, June 11, 2016
Tuesday, June 07, 2016
El ciclón santaanero sigue soplando en improbables sitios y generando extrañas lecturas. Agradezco muchísimo a los colegas de Al Momento Noticias por este amable comentario en su página. Dicen que mi novela “entremezcla las relaciones de poder en México con la mafia, los medios de comunicación y el mundo de las apuestas en el estado de Tamaulipas”. Bueno, al fin y al cabo todo queda en las chulas fronteras de Piporro. “De Tijuana a Ciudad Juárez, de Ciudad Juárez Laredo y de Laredo a Matamoros, sin olvidar a Reynosa”. ¿Podría Vientos de Santa Ana funcionar como una historia tamaulipeca? Acaso no es tan radicalmente tijuanera como yo creía. Ahora que si de verdad quieren explorar a profundidad las entrañas de ese violento terruño ubicado entre el Bravo y el Pánuco, mi recomendación es que lean No manden flores del gran Martín Solares, novela vecina en Random House. Yo la estoy leyendo ahora mismo.
http://www.almomento.mx/vientos-de-santa-ana-la-nueva-novela-que-aborda-los-asesinatos-a-periodistas/
Monday, June 06, 2016
Al momento de sentir sobre la manzana de Adán el filo de la navaja que va a degollarlo, Sergio Brabante yace con la mirada perdida en algún punto del horizonte tratando de distinguir la silueta de las Islas Coronado.
El primer destello del amanecer es apenas un presagio entre el manto de niebla y de las islas solo se adivina el brillo moribundo de un faro extinguiéndose en la lejanía.
Antes de salir a la terraza, Sergio se ha servido un nuevo vaso de Buchanas para tragarse rivotril y medio. No más coca por ahora, piensa mientras invoca el milagro de poder dormir la mañana completa y estar fresquecito al momento de la encerrona de la tarde
Sunday, June 05, 2016
El reporte meteorológico indica condición Santa Ana en la mesa de novedades de librería Gandhi Tijuana. Tarde pero seguro. Por si las dudas, Iker y yo fuimos a corroborarlo y en efecto, el ventarrón nos recibió en la puerta. De fuente fidedigna recibo un reporte de condición ventosa en Librería Sor Juana. El tigre tijuanero ya merodea por ahí. Intuyo que ya debe estar en librería Gerardo y a mis amigos de El Día está por llegarles. Por lo que a la CDMX respecta, llegó primero al Péndulo y sé que ya está en Porrúa, Casa del Libro, Gandhi y posiblemente Sanborns. Donde según me reportan el ciclón santaanero brilla por su ausencia (y eso no me tiene nada contento) es en Gandhi Monterrey. En realidad aún no tengo notificación de su presencia en alguna librería regia. Cualquier reporte es apreciado raza. Por lo que a mí respecta ha llegado el tiempo de tirarme a matar. Las palabras de Sergio González Rodríguez han tenido la contundencia para ser el banderazo de arranque, la señal que necesitaba para ahora sí salir a pasear con el viento. Agárrense