Ahora que Marilyn se ha puesto de moda
gracias a Blonde, les recomiendo de todo corazón que le den una leída a esta
gran novela de mi máster tampiqueño Rafael Ramírez Heredia: Se llama Con M de
Marilyn y narra la fantástica y alocada historia de los días que la rubia pasó
en México en febrero de 1962, cinco meses antes de morir. En teoría es una obra
de ficción, aunque muchas de las cosas que nos narra el tampiqueño ocurrieron
en verdad. Marilyn llegó al México de López Mateos inmersa en un torbellino de
quebrantos emocionales, recién separada de Arthur Miller y desayunando pastillas y champaña. El tampiqueño
nos narra la historia del amante mexicano de Marilyn, un joven cineasta que en
la novela se llama José Baños y en la realidad se apellidaba Bolaños. Claro, más
allá del cachondo romance y de las andanzas de la blonda comiendo tacos en el centro,
bebiendo tequila en Garibaldi y
saludando a Luis Buñuel en Taxco, Ramírez Heredia, fiel a su costumbre, nos
narra una historia de detectives y espías que tampoco está nada alejada de la
realidad. Y es que la visita de Marilyn se produjo en el momento más tenso de
la Guerra Fría, en el año de la crisis de los misiles y lo cierto es que
agentes encubiertos del FBI vigilaban los pasos de la Monroe en México mientras
la mafia italoamericana hacía lo propio. Las crónicas coinciden en que con todo
y su desbarrancadero interior, sus vacaciones mexicanas fueron un oasis de
felicidad para Marilyn, los últimos días luminosos antes de sumergirse en la
oscuridad. La de Ramírez Heredia es una Marilyn más jocosa, cachonda y buena
onda que la de Joyce Carol Oates, que jamás para de llorar. Con M de Marilyn es
una novela ideal para que un buen cineasta le haga justicia. Ojalá alguno
levante la mano.