Nuevos discos retumban en mi cabeza. El martes 26 de agosto salió a la venta en Estados Unidos el nuevo disco de Motorhead, Motorized, y mi compa el Octavio García ni tardo ni perezoso fue a agarrarlo a San Diego. Obvia decir que el disco ya retumba en mi iPod. Cierto que la horda de Lemmy tiene una buena legión de seguidores por estos rumbos, pero creo que somos los primeros tipos en todo Tijuana que contamos con ese material. Un disco de Motorhead, es siempre un disco de Motorhead. Qué esperar de ellos? Afortunadamente, lo de siempre. Lemmy y sus compas no se andan con experimentaciones ni mariconadas. Rolas que me pasaron, English Rose, Rock Out, One Short Life, Time is Right. En realidad todo el disco. Puro Rock and Roll sucio y machacón. No pido más, no espero más. Es como un vaso de Jack Daniels pelón, te sabe a lo mismo que te supo hace dos décadas y por eso mismo te sabe a gloria.
Siguiendo con ese Rock and Roll puerco, he de decir que adquirí el nuevo disco de Chrome Division, el proyecto alterno de Shagrath de Dimmu Borgir y otros compas noruegos. Digamos que es la versión escandinava de Motorhead. Sonido sucio, rasposo, como un bourbon Wild Turkey. Rolonón, Raven Black Cadillac. Que me perdonen los blackmetaleros, pero soy más feliz con los dos discos de Chrome Division que con toda la discografía de Dimmu.
Mi amigo Hugo Fernández me ha hecho el favor de hacerme llegar el nuevo disco de Mister Alice Cooper, Along Came a Spider, para que escriba sobre él en La Guía. Le he dado un par de escuchadas, pero aún no me siento listo para emitir una opinión. El abuelo de Detroit se aventó un muy buen jale con su rolita Toy Master en el tercer disco de Avantasia de mi compa Tobias Sammeth, pero este disco conceptual del asesino serial apenas lo empiezo a digerir. De pilón, por la módica cantidad de 37 pesos me hice del Relixiv de los veteranos thrashers nezayorkos Over Kill. Hoy le di una escuchada al nuevo disco de Opeth. Suena re progre, a toda madre.
Vaya semanita la que llega. Motorhead en San Diego y Gorgoroth en Tijuana. Ya les contaré si salgo vivo.
Siguiendo con ese Rock and Roll puerco, he de decir que adquirí el nuevo disco de Chrome Division, el proyecto alterno de Shagrath de Dimmu Borgir y otros compas noruegos. Digamos que es la versión escandinava de Motorhead. Sonido sucio, rasposo, como un bourbon Wild Turkey. Rolonón, Raven Black Cadillac. Que me perdonen los blackmetaleros, pero soy más feliz con los dos discos de Chrome Division que con toda la discografía de Dimmu.
Mi amigo Hugo Fernández me ha hecho el favor de hacerme llegar el nuevo disco de Mister Alice Cooper, Along Came a Spider, para que escriba sobre él en La Guía. Le he dado un par de escuchadas, pero aún no me siento listo para emitir una opinión. El abuelo de Detroit se aventó un muy buen jale con su rolita Toy Master en el tercer disco de Avantasia de mi compa Tobias Sammeth, pero este disco conceptual del asesino serial apenas lo empiezo a digerir. De pilón, por la módica cantidad de 37 pesos me hice del Relixiv de los veteranos thrashers nezayorkos Over Kill. Hoy le di una escuchada al nuevo disco de Opeth. Suena re progre, a toda madre.
Vaya semanita la que llega. Motorhead en San Diego y Gorgoroth en Tijuana. Ya les contaré si salgo vivo.