99ers
Los 99ers de L.A. También el
futbol barrial de los gringos está infestado de sangre hooligan. Divisiones inferiores del balompié gabacho,
canchas malamuerteras, skinhedas malencarados. Yo defendía o hacía de promotor
de un equipucho recién comprado e impuesto, pero una chaliforniacosa me hacía
ver que la raza brava está con 99ers. ¿99 red balloons es su himno? En
cualquier caso debíamos salir por patas ante el inminente ataque de una horda malandra y a nuestro
alrededor solo había calles mugrosas con esencia de suburbio industrial y por
supuesto un McDonalds, el infaltable, ordinario y chatarril McDrogas a la
entrada de un freeway hacia donde
corríamos por nuestra vida. Sueño reparador, no tanto alcohol en la sangre.
Antenoche no fue el caso. Por herencia queda el Back in control como palabra
mágica o acertijo resuelto. No pocas veces en las errancias duermeveleras soy
examinado y el Back in control, push them to surrender era mi respuesta mágica,
mi clave de acceso. Después la densa madrugada y el bifurcar neuronal del
whisky. Cualquier domingo nublado de mayo es ideal para volver a abrevar en los
derrumbes, ensayos y las tantísimas salidas por la tangente.