Eterno Retorno

Tuesday, February 07, 2023

Un clavado en el Manzanares

 


Un clavado en el Manzanares que no es tal, sino un río alternativo y puerco que atraviesa la periferia madrileña…larga es la jornada duermevelera; densa, cinematográfica y metetextual. Narro mi sueño dentro del mismo sueño e improviso su narrativa. Soy yo saliendo algún barrio bravo tijuanero donde hay un improbable mercado subterráneo de donde emerjo a la calle y de pronto todo irrumpía como en un cuadro de realismo mágico: la luz del mediodía, los perros, las frutas mi caminar por una calle tijuanense con la certidumbre en torno a la inminencia de mi asesinato, una suerte de Santiago Nasar bajacaliforniano preguntándome por mi bipolaridad en mi forma de amar a esta ciudad. La ciudad que amas puede enseñarte sus fauces y morderte en cualquier momento. Mi ciudad de cuento se torna violenta. Caminaba al borde de un desfiladero y de pronto no era yo, sino la alcaldesa quien estaba en peligro de muerte.

Villy fue personaje principal del segundo tiempo duermevelero. Se confesaba históricamente enamorado de una chica de Santa Engracia tan parecida a él, que resultaba ser él mismo, una suerte de desdoblamiento de amor Narciso. Después era yo, viendo una jornada completa de las divisiones inferiores de Inglaterra, estrenando plantillas para tachones especializados en canchas mojadas ríoplatenses.