Eterno Retorno

Saturday, February 04, 2023

un híbrido de Cachacuaz y Crononauta

 


Era una vieja casa en la Buena Vista donde habitaba un híbrido de Cachacuaz y Crononauta. Por la planta alta entrábamos a un viejo recibidor donde aguardaría algún abuelo tiránico y patriarcal, ancestrales adornos en desuso y alfombras percudidas. Le sugiero a la Cone baja e irnos, pero el descenso implicar desafiar una escalera de caracol oxidado, con peldaños y barandales carcomidos. En la parte una cochera estudio estilo Roma o casa del Rux donde la hermana jipiosa de Cachacuaz-Crononauta coordina un taller de artesanías donde, contra todos los pronósticos, alguna pieza había trabajado la Cone. Me entretengo hojeando la dispersa biblioteca de Crononauta-Cachacuaz: Rashomon de Akutugawa versión cómic, Yukio Mishima, algún monero tipo Fisgón y tundeteclas de viejísima guardia. La casa daba al parque Buena Vista donde pasa el camión azul rumbo a Playas. Antes del mar y de ser exiliado del útero del sueño profundo, el tema era la despedida de Tomás Boy en aquel juego de Selección Mexicana vs Tigres. Ikercho me pregunta cuál habría sido el marcador ideal y le respo do que me habría gustado un 3-3 con goles de Boy con ambas camisetas. Después recordé que fue un 2-0 con penales fallados de Aceves y Galindo, que el Jefe Boy ha muerto y que estaba en el sillón de la sala donde la pantalla del celular escupió siniestro y profético el Martes 13 (4:01 a.m.) El polaco tramposo luciendo su cruz de San Jorge enfrenta a su antigua tribu bávara. La kafkiana máquina cultural me exige en pesadilla les entregue mañana mi puta carta devaluación. No, se ve que no hay nivel, nada nos van a dar, la cultura ni el que la parió. Joder, hombres del saber…ios a cagar.