Cosas de Walpurgis Lullaby
Walpurgis Lullaby fue el hijo bastardo de dos estudiantes de teatro shakespeareano en Starafford cuyos nombres artísticos eran Manfred y Melmoth. Dos teatreros con complejo de héroe byroniano, bastante afectos al ácido lisérgico, a la astrología y al ocultismo, quienes deseaban crear un concepto de rock-performance poético con elevadas dosis de irreverencia y blasfemia. Ambos eran buenos actores y no desmerecían como poetas y si bien siempre estuvieron muy lejos de aspirar a ser unos músicos virtuosos, tampoco es que hicieran el ridículo con sus instrumentos de cuerdas. En marzo de 1973, Manfred y Melmoth empezaron a ensayar la puesta en escena de una misa negra, consistente en el diálogo entre dos brujos que se disponían a inmolar a una doncella en el altar de sacrificios. Una chica desnuda yacía rodeada por seis veladoras negras (aunque hay quien asegura que eran rojas) acostada boca abajo sobre un altar cubierto por una manta roja (aunque hay quien asegura que era negra). Ante el cuerpo de la chica, Manfred y Melmoth sostenían un diálogo irreverente en donde los elementos de teatro del absurdo y ese desparramadero de incoherencias que pretende pasar por surrealismo se imponían a la blasfemia. El acto culminante era la comunión negra que al principio se limitó a introducir una ostia por el culo de la chica. Al parecer en aquella primera etapa de representaciones en los círculos teatreros la modelo acostada en el altar de sacrificios fue siempre la misma, una estudiante de teatro que utilizaba el nombre artístico de Asmodina y que fue noviecilla o compañera sexual de Manfred, aunque no son pocos quienes aseguran que cada noche improvisaban con una chica diferente. En todo caso el papel de la joven se limitaba a permanecer acostada boca abajo enseñando las nalgas y aguantando calladita cuando Melmoth o Manfred guardaban la sacra ostia dentro de su culo.