Lo bueno que me pusieron bajo la sombra de un arbolito, porque el canijo sol cachanilla no perdona.
Hace algunos años ya que no voy a la ciudad que atrapó al
Sol, pero gracias a mi colega Dianeth Pérez me acabo de enterar hoy que por
allá andamos rolando, justamente frente al Teatro Universitario, en esta
exposición que ha montado el gran Ale Meter con retratos de todos aquellos que
la hacemos a la pepena de palabras en tierra bajacaliforniana. La foto fue
tomada frente al muro fronterizo en Playas de Tijuana. A veces se extraña beber
una Cucapá a punto de congelación en un mediodía de 40 grados y unos camarones
almendrados en la Justo Sierra. Lo bueno que me pusieron bajo la sombra de un
arbolito, porque el canijo sol cachanilla no perdona.