Eterno Retorno

Thursday, December 21, 2023

Mi Pushkin

 


Mi Pushkin de Marina Tsvietáieva es una mirada personalísima y sui generis. Es Pushkin visto a través de los ojos de una niña que se enamora primero de su estatua y después de sus personajes - Tatiana y Oneguin-  a los que conoce en clandestinas lecturas infantiles. Tal como marca el manual con Marina, se trata de una inmersión casi surrealista en la vida y obra del gran romántico ruso, a la fecha su poeta nacional. Lo primero que supo Marina (y también lo primero que supe yo) fue a que Pushkin lo mataron en un duelo. Después se enteró (y eso yo no lo sabía) que Aleksandr era bisnieto de un príncipe etíope que llegó como esclavo a Rusia (solo hasta ahora reparo en los rasgos mulatos del poeta que, viéndolo bien, se da un aire a Vicente Guerrero). Traducido como todo lo Tsvietáieva por la gran Selma Ancira, Mi Pushkin me recuerda la fascinación de mis lecturas infantiles. Puedes releer infinitas veces a un clásico, pero nada se igualará a la primera lectura si lo leíste cuando eras niño.