Eterno Retorno

Wednesday, April 13, 2016

La Guerra de Crimea fue el conflicto bélico que inauguró la figura del reportero de trinchera. El enfrentamiento entre el Imperio Ruso contra la alianza de ingleses y franceses que defendían al Imperio Otomano fue el primero en ser cubierto por corresponsales desde la mismísima línea del frente. Nunca antes en la larga historia bélica de la humanidad se había registrado la presencia de personas cuya única labor en el campo de batalla era informar. Para algunos Crimea fue la última guerra antigua y para otros fue la primera guerra moderna. Una de las batallas más sangrientas de todo el conflicto fue la de Balaclava, el 25 de marzo de 1854. La guerra de celos entre el jefe de la brigada ligera, Lord Cardigan, contra el jefe de la división de caballería, Lord Duncan, provocó un desastre estratégico en las filas británicas. Miles de ingleses fueron carne de cañón frente a la artillería rusa, una matazón despiadaada producto de la negligencia. En cualquier caso, los británicos avanzaron posiciones frente a Sebastopol pese al desastre. La batalla de Balaclava fue inmortalizada en una canción por la mejor banda de esta galaxia y universos adyacentes que por si no lo saben se llama Iron Maiden. La canción, titulada The Trooper, compuesta por Steve Harris, toma algunas líneas del poema de Lord Tennyson “The Charge of the Light Brigade”. Pocos años después la prendidísima rola inspiró la creación de la delicia de cerveza británica que estoy bebiendo esta noche y con la cual brindo con ustedes y por este metalera y literaria vida mía. ¡Salud!