¿Pearl Harbor?
Me parece que hay un desmedido e injustificado interés de ambas partes y tal vez de los espectadores por involucrarme en el ridículo pleito que desde hace más de una semana sostiene Fernando Nachón contra Beam y Manuel Lomelí.
Tal parece que a fuerzas quieren verme defendiendo a una de las partes y atacando a la otra. Algunos piensan que yo soy el embajador o el representante de Nachón en Tijuana y por ende debo defenderlo y por ello piensan que mi blog es el lugar idóneo para dejarle mensajes. Se equivocan señores. Yo no tengo nada que ver con ese señor.
Por otra parte, hay quien absurdamente piensa que yo estoy atrás de las agresiones en contra de Fernando Nachón. También se equivocan. Yo no pierdo mi tiempo en eso y cuando tengo algo en contra de alguien canto el tiro directo y con mi firma.
Sin haberla ni temerla y pese a haber mantenido una absoluta neutralidad en este pueril conflicto en el que Eterno Retorno ha sido involuntario campo de batalla, he resultado agredido por ambas partes que en su afán de involucrarme a tomar partido, han empezado a perjudicarme en un sentido que va más allá del mero ejercicio bloguero y esto ya me empezó a incomodar, sobre todo porque no les he dado motivo alguno.
Una de las partes en el conflicto, (según me han dicho pues a mí ni me consta) falseó una conversación cibernética conmigo que jamás he mantenido, pues no lo conozco, ni tengo su mail, ni está en mi lista de contactos msg. Ignoro sus motivos para hacer eso.
Pero otra de las partes va mucho más lejos en su agresión y se permite amenazarme con demandarme penalmente so pretexto que mi dirección y mi nombre son los únicos reales que posee, llama a mi casa a las 2:30 de la mañana y por si fuera poco crea un blog especial para agredirme.
Creo que tengo motivos de sobra para sentirme ofendido y empezar a disparar artillería, sobre todo en el segundo caso, donde me están provocando abiertamente. Digamos que este fin de semana fue mi Pearl Harbor, un ataque que me dio un pretexto más que justificado para entrarle a este pleito absurdo.
Sin embargo, meditando el asunto, me doy cuenta que ningún provecho voy a sacar de intervenir en este ridículo sainete, así que, vaya decepción para los morbosos, mantendré mi neutralidad. Voy a arreglar este asunto en privado con cada uno y sin prestarme a un burdo juego de comadres de lavadero. Mi pleito no será público.
- Vista la situación, creo que es mi obligación hacer una serie de precisiones-
Sobre Fernando Nachón
Conozco a Fernando Nachón como lector de sus libros y he intercambiado alguna correspondencia con él. No lo conozco personalmente y jamás he dialogado con él, ni siquiera vía msg. No tengo ningún pacto ni alianza con su persona, ni es mi amigo y lo único que le debo es una deuda de gratitud por un libro que me regaló hace unos meses. No tengo el más mínimo interés en defenderlo o en atacarlo, aunque considero que es un error gravísimo de su parte el tratar de llevar este conflicto más allá de la blogósfera y más erróneo aún el tratar de involucrarme a mí.
Sobre Manuel Lomelí
Manuel Lomelí es mi colega y fue mi compañero de trabajo hace tres años. Es al único de los involucrados que conozco personalmente. Llevo una buena relación con él y me cae muy bien, pero no creo tener la autoridad moral como para decirle qué escriba y que no, ni mucho menos soy quien para juzgar sus actos.
Sobre Beam:
A Beam no tengo el gusto de conocerlo, no se quién es y si quieren que sea honesto, ni siquiera se como se llama. No está en mi lista de contactos msg así que jamás he dialogado con él vía cibernética.
A manera de conclusión, diré que las personas estúpidas de mentes débiles, pierden el tiempo en hablar de otras personas. Las personas de mediana inteligencia discuten los hechos y sólo las personas inteligentes debaten las ideas.
Yo le entraré a los trancazos de cuanto debate me inviten a participar cuando me propongan un debate de ideas, como los he tenido muchos en la blogósfera y ahí sí, a pegarle duro, por controvertido que sea el tema y entonces sí no me toco el corazón. (Esperen por cierto el del próximo 12 de Octubre fecha en que pienso celebrar con todo la Conquista Española) Desgraciadamente aquí no veo ideas, ni hechos y no se ni siquiera qué carajos se está discutiendo o cuál es el motivo de la batalla. Luego entonces no puedo intervenir.
A lo largo de los dos años que llevo escribiendo Eterno Retorno, he sido respetuoso de las vidas privadas de todos los blogueros y cuando he tenido desacuerdos o controversias los he sabido enfrentar con categoría y de frente, no con amenazas ridículas ni falsedades.
El blog es una cancha o un campo de batalla y yo no trasciendo sus límites. Eso me queda muy claro. Yo sólo se pelear de frente y con reglas claras.
Escriban y hagan lo que quieran, háganse pedazos, pero no me involucren. Siéntanse en mi tag como en su casa y digan lo que gusten. En verdad me tiene sin cuidado.
Daniel Salinas Basave es únicamente responsable de lo que se publica en Eterno Retorno y no en su tag ni mucho menos en otros blogs.
Y cuando tengan un debate con un poquito de más altura, ese día me invitan a participar por favor.
Me parece que hay un desmedido e injustificado interés de ambas partes y tal vez de los espectadores por involucrarme en el ridículo pleito que desde hace más de una semana sostiene Fernando Nachón contra Beam y Manuel Lomelí.
Tal parece que a fuerzas quieren verme defendiendo a una de las partes y atacando a la otra. Algunos piensan que yo soy el embajador o el representante de Nachón en Tijuana y por ende debo defenderlo y por ello piensan que mi blog es el lugar idóneo para dejarle mensajes. Se equivocan señores. Yo no tengo nada que ver con ese señor.
Por otra parte, hay quien absurdamente piensa que yo estoy atrás de las agresiones en contra de Fernando Nachón. También se equivocan. Yo no pierdo mi tiempo en eso y cuando tengo algo en contra de alguien canto el tiro directo y con mi firma.
Sin haberla ni temerla y pese a haber mantenido una absoluta neutralidad en este pueril conflicto en el que Eterno Retorno ha sido involuntario campo de batalla, he resultado agredido por ambas partes que en su afán de involucrarme a tomar partido, han empezado a perjudicarme en un sentido que va más allá del mero ejercicio bloguero y esto ya me empezó a incomodar, sobre todo porque no les he dado motivo alguno.
Una de las partes en el conflicto, (según me han dicho pues a mí ni me consta) falseó una conversación cibernética conmigo que jamás he mantenido, pues no lo conozco, ni tengo su mail, ni está en mi lista de contactos msg. Ignoro sus motivos para hacer eso.
Pero otra de las partes va mucho más lejos en su agresión y se permite amenazarme con demandarme penalmente so pretexto que mi dirección y mi nombre son los únicos reales que posee, llama a mi casa a las 2:30 de la mañana y por si fuera poco crea un blog especial para agredirme.
Creo que tengo motivos de sobra para sentirme ofendido y empezar a disparar artillería, sobre todo en el segundo caso, donde me están provocando abiertamente. Digamos que este fin de semana fue mi Pearl Harbor, un ataque que me dio un pretexto más que justificado para entrarle a este pleito absurdo.
Sin embargo, meditando el asunto, me doy cuenta que ningún provecho voy a sacar de intervenir en este ridículo sainete, así que, vaya decepción para los morbosos, mantendré mi neutralidad. Voy a arreglar este asunto en privado con cada uno y sin prestarme a un burdo juego de comadres de lavadero. Mi pleito no será público.
- Vista la situación, creo que es mi obligación hacer una serie de precisiones-
Sobre Fernando Nachón
Conozco a Fernando Nachón como lector de sus libros y he intercambiado alguna correspondencia con él. No lo conozco personalmente y jamás he dialogado con él, ni siquiera vía msg. No tengo ningún pacto ni alianza con su persona, ni es mi amigo y lo único que le debo es una deuda de gratitud por un libro que me regaló hace unos meses. No tengo el más mínimo interés en defenderlo o en atacarlo, aunque considero que es un error gravísimo de su parte el tratar de llevar este conflicto más allá de la blogósfera y más erróneo aún el tratar de involucrarme a mí.
Sobre Manuel Lomelí
Manuel Lomelí es mi colega y fue mi compañero de trabajo hace tres años. Es al único de los involucrados que conozco personalmente. Llevo una buena relación con él y me cae muy bien, pero no creo tener la autoridad moral como para decirle qué escriba y que no, ni mucho menos soy quien para juzgar sus actos.
Sobre Beam:
A Beam no tengo el gusto de conocerlo, no se quién es y si quieren que sea honesto, ni siquiera se como se llama. No está en mi lista de contactos msg así que jamás he dialogado con él vía cibernética.
A manera de conclusión, diré que las personas estúpidas de mentes débiles, pierden el tiempo en hablar de otras personas. Las personas de mediana inteligencia discuten los hechos y sólo las personas inteligentes debaten las ideas.
Yo le entraré a los trancazos de cuanto debate me inviten a participar cuando me propongan un debate de ideas, como los he tenido muchos en la blogósfera y ahí sí, a pegarle duro, por controvertido que sea el tema y entonces sí no me toco el corazón. (Esperen por cierto el del próximo 12 de Octubre fecha en que pienso celebrar con todo la Conquista Española) Desgraciadamente aquí no veo ideas, ni hechos y no se ni siquiera qué carajos se está discutiendo o cuál es el motivo de la batalla. Luego entonces no puedo intervenir.
A lo largo de los dos años que llevo escribiendo Eterno Retorno, he sido respetuoso de las vidas privadas de todos los blogueros y cuando he tenido desacuerdos o controversias los he sabido enfrentar con categoría y de frente, no con amenazas ridículas ni falsedades.
El blog es una cancha o un campo de batalla y yo no trasciendo sus límites. Eso me queda muy claro. Yo sólo se pelear de frente y con reglas claras.
Escriban y hagan lo que quieran, háganse pedazos, pero no me involucren. Siéntanse en mi tag como en su casa y digan lo que gusten. En verdad me tiene sin cuidado.
Daniel Salinas Basave es únicamente responsable de lo que se publica en Eterno Retorno y no en su tag ni mucho menos en otros blogs.
Y cuando tengan un debate con un poquito de más altura, ese día me invitan a participar por favor.
