Pasos de Gutenberg
Ángeles del abismo
Enrique Serna
Por Daniel Salinas Basave
En estos tiempos de aburridos experimentos post-narrativos ocultos en un disfraz de falsa modernidad, da gusto encontrarse con una apuesta por una novela mayor.
Harto de lecturas en las que estoy condenado a ver al fondo inmolado en el engañoso altar de la forma, hoy en verdad celebro haberme encontrado con una novela ambiciosa y redonda.
Ángeles del abismo de Enrique Serna superó por mucho mis expectativas y aunque después de leer El seductor de la patria ya tenía en muy alto concepto al autor, lo cierto es que esta novela me sorprendió.
No es fácil jugársela la con una novela larga, de estilo romántico- picaresco, con varias decenas de personajes muy bien construidos y un marco histórico específico, en este caso el México virreinal, que el autor rescata con maestría.
Pese a la diversidad de personajes y las diferentes historias que se entretejen, la novela jamás se le cae al narrador.
Aunque se basa en un proceso inquisitorial del Siglo XVII en contra de una falsa beata, lo cierto es que sería un error calificar a Ángeles del abismo como una novela histórica.
Si bien aparecen algunos personajes históricos como la propia Sor Juana Inés de la Cruz y el poeta oscuro poeta Luis Sandoval y Zapata, la realidad es que casi el total de la novela es una excelente ficción de Serna.
La novela tiene como personajes centrales a Crisanta, una pícara joven con dotes de actriz transformada por la necesidad en falsa beata y su amante Tlacotzin, un indio que se debate entre la fe católica y la adoración de ídolos prehispánicos.
Crisanta vive con su padre, un tiránico español llamado Onésimo que la esclaviza y maltrata, mientras que Tlacotzin vive en la sierra con una madre convertida al cristianismo y un padre aferrado a los cultos mexicas.
Alrededor de su historia de amor, desfila una pasarela de personajes novhispanos de la más diversa calaña que conforman un interesantísimo mosaico de la sociedad colonial.
Clérigos que se disputan con uñas y dientes herencias y privilegios, poetas caídos en desgracia, pícaros, ladinos, esclavos, doncellas enamoradas que fingen arrebatos místicos y chamanes indígenas que practican cultos paganos en la clandestinidad.
Amante de la historia, Serna se preocupó por estudiar a fondo y asesorarse bien para construir un entorno histórico veraz para encuadrar a sus personajes.
También rescata fragmentos de poemas clásicos de San Juan de la Cruz, de Sor Juana, diálogos de Calderón de la Barca, meditaciones de Santa Teresa de Jesús e incluso algo de lírica náhuatl.
El resultado es una historia tremendamente divertida que rescata lo más delicioso de la novela picaresca del Siglo de Oro español y al mismo tiempo expone las injusticias, contradicciones y virtudes de la colonia.
Me atrevo a decir que Ángeles del abismo es la mejor novela sobre el virreinato escrita en tiempos modernos.
Por lo pronto, yo aún estoy disfrutando de ese inigualable sabor de boca que genera el leer una gran novela.
Abriendo las Alas
Me hubiera gustado mucho estar ahí. De cualquier manera, un gran abrazo a mi Madre desde esta lejana tierra. Escuchando Moody Blues mando un brindis y me hago presente espiritualmente, mientras transcribo textualmente la nota del evento.
Por Rodrigo Hinojosa
Con diferentes temas como la figura humana, la naturaleza o el realismo, los cuales están plasmados en sus obras, se inauguró la exposición "Abriendo las Alas" de Ana Basave de Salinas, la noche del 28 de septiembre.El evento al que asistieron familiares, amigos e invitados fue llevado a cabo en el Instituto del Desarrollo Humano, a partir de las 20:00 horas.
Agustín Basave Fernández del Valle, padre de la pintora, fue quien dio por inaugurada la muestra, la cual cuenta con 49 piezas en acrílico, dibujo a lápiz, lápiz de color, acuarelas y óleos.
Es una recopilación de las obras que he hecho, se llama "Abriendo las Alas porque yo retomé mi trabajo después de un tiempo de haberlo dejado, además porque es la primera vez que expongo yo sola, expresó Basave de Salinas.
Agregó que el dibujo a lápiz y a color es la nueva técnica que maneja
Ángeles del abismo
Enrique Serna
Por Daniel Salinas Basave
En estos tiempos de aburridos experimentos post-narrativos ocultos en un disfraz de falsa modernidad, da gusto encontrarse con una apuesta por una novela mayor.
Harto de lecturas en las que estoy condenado a ver al fondo inmolado en el engañoso altar de la forma, hoy en verdad celebro haberme encontrado con una novela ambiciosa y redonda.
Ángeles del abismo de Enrique Serna superó por mucho mis expectativas y aunque después de leer El seductor de la patria ya tenía en muy alto concepto al autor, lo cierto es que esta novela me sorprendió.
No es fácil jugársela la con una novela larga, de estilo romántico- picaresco, con varias decenas de personajes muy bien construidos y un marco histórico específico, en este caso el México virreinal, que el autor rescata con maestría.
Pese a la diversidad de personajes y las diferentes historias que se entretejen, la novela jamás se le cae al narrador.
Aunque se basa en un proceso inquisitorial del Siglo XVII en contra de una falsa beata, lo cierto es que sería un error calificar a Ángeles del abismo como una novela histórica.
Si bien aparecen algunos personajes históricos como la propia Sor Juana Inés de la Cruz y el poeta oscuro poeta Luis Sandoval y Zapata, la realidad es que casi el total de la novela es una excelente ficción de Serna.
La novela tiene como personajes centrales a Crisanta, una pícara joven con dotes de actriz transformada por la necesidad en falsa beata y su amante Tlacotzin, un indio que se debate entre la fe católica y la adoración de ídolos prehispánicos.
Crisanta vive con su padre, un tiránico español llamado Onésimo que la esclaviza y maltrata, mientras que Tlacotzin vive en la sierra con una madre convertida al cristianismo y un padre aferrado a los cultos mexicas.
Alrededor de su historia de amor, desfila una pasarela de personajes novhispanos de la más diversa calaña que conforman un interesantísimo mosaico de la sociedad colonial.
Clérigos que se disputan con uñas y dientes herencias y privilegios, poetas caídos en desgracia, pícaros, ladinos, esclavos, doncellas enamoradas que fingen arrebatos místicos y chamanes indígenas que practican cultos paganos en la clandestinidad.
Amante de la historia, Serna se preocupó por estudiar a fondo y asesorarse bien para construir un entorno histórico veraz para encuadrar a sus personajes.
También rescata fragmentos de poemas clásicos de San Juan de la Cruz, de Sor Juana, diálogos de Calderón de la Barca, meditaciones de Santa Teresa de Jesús e incluso algo de lírica náhuatl.
El resultado es una historia tremendamente divertida que rescata lo más delicioso de la novela picaresca del Siglo de Oro español y al mismo tiempo expone las injusticias, contradicciones y virtudes de la colonia.
Me atrevo a decir que Ángeles del abismo es la mejor novela sobre el virreinato escrita en tiempos modernos.
Por lo pronto, yo aún estoy disfrutando de ese inigualable sabor de boca que genera el leer una gran novela.
Abriendo las Alas
Me hubiera gustado mucho estar ahí. De cualquier manera, un gran abrazo a mi Madre desde esta lejana tierra. Escuchando Moody Blues mando un brindis y me hago presente espiritualmente, mientras transcribo textualmente la nota del evento.
Por Rodrigo Hinojosa
Con diferentes temas como la figura humana, la naturaleza o el realismo, los cuales están plasmados en sus obras, se inauguró la exposición "Abriendo las Alas" de Ana Basave de Salinas, la noche del 28 de septiembre.El evento al que asistieron familiares, amigos e invitados fue llevado a cabo en el Instituto del Desarrollo Humano, a partir de las 20:00 horas.
Agustín Basave Fernández del Valle, padre de la pintora, fue quien dio por inaugurada la muestra, la cual cuenta con 49 piezas en acrílico, dibujo a lápiz, lápiz de color, acuarelas y óleos.
Es una recopilación de las obras que he hecho, se llama "Abriendo las Alas porque yo retomé mi trabajo después de un tiempo de haberlo dejado, además porque es la primera vez que expongo yo sola, expresó Basave de Salinas.
Agregó que el dibujo a lápiz y a color es la nueva técnica que maneja