Eterno Retorno

Thursday, December 16, 2021

Santísimo Patrono de la Norteñidad

  


Dado que soy un güero aventado habitante de las más chula frontera del Norte, hoy le entro con renovada fe al bailazo al sonar del acordeón y el bajo sexto, pues resulta que no cualquier día cumple cien años el Santo Patrono de todos los norteños. Don Eulalio nació en Los Herrera el 16 de diciembre de 1921, vivió en no pocas ciudades fronterizas, empezó estudiando para médico, se recibió de contador y en algún momento fue colega reportero en El Porvenir de Monterrey. Pedro Infante lo hizo debutar como actor de radio novela y en Ahí viene Martín Corona se fundió para la eternidad con su personaje: El Piporro. Tuve la fortuna de conocerlo personalmente en una cena de mi tío Agustín (en septiembre de 1992) y de escucharlo cada que la alegría asciende en una carnita asada o una velada cervecera. Pelao fino, corazón grande. Hoy en su Centenario, he decidido presentar cinco pruebas para demostrar su condición de Santísimo Patrono. El Evangelio Piporriano sostiene que existen evidencias contundentes que dan fe de sus milagros. Presten atención, descarriadas ovejas de la norteñidad:

1- Sólo una deidad puede crear un personaje mitológico como el traga-balas, capaz de ser fusilado y escupir los proyectiles que le entran por el tronco de la oreja sin siquiera mascar tabaco.

2- Sólo un Dios puede garantizar que las balas caigan en su sitio justo, como ocurre en Borracho el borracho: “Ahora que las balas cayeron en su sitio, las de allá pa acá, acá y las de aquí pa allá, pos allá”.

3- Ni siquiera los dioses griegos que protegían a Aquiles, pudieron crear una armadura tan poderosa como el forro de mugre que protegía al Ojo de Vidrio de las balas de sus enemigos. Al final, sólo una serpiente coralillo pudo matar a Porfirio Cadena, de la misma forma que la flecha de Paris en el talón de Aquiles acabó con el héroe.

4- Aunque la deidad no libera de la muerte a quienes han sido elegidos, les reserva muertes piadosas. Caso de Rosita Alvírez: El día que la mataron Rosita estaba de suerte, de tres tiros que le dieron, nomás uno era de muerte.

5- Tan sólo un poder divino es capaz de transformar a un humilde agricultor tamaulipeco llamado Natalio Reyes Colás, en un famoso cantante de jazz llamado Nat King Cole.

¿Necesitan más pruebas que demuestren su Santidad? Conviértanse, incrédulos. La Sagrada Orden Piporriana seguirá aportando evidencias al cónclave cardenalicio. Por ahora raza, os convoco a la peregrinación anual al santuario de Los Herreras, Meca de todos los piporrianos del Universo. Ajúa