Eterno Retorno

Monday, June 07, 2004

Narcoviviendas

Hay sitios, casas, cuartos, que cargan una vibra capaz de infiltrarse en cada poro de tu piel. En esos lugares puedes sentir que hablas de tu con los fantasmas. Bueno, debo aclarar que en los dos casos que aquí mencionaré, llegué sabiendo a priori de que lado mascaba la iguana. Me hubiera gustado saber si habría sido capaz de sentir una vibra especial de haber llegado a ciegas y no con una idea preconcebida.
En fin, la cuestión es que la semana pasada visité dos casas que sirvieron como refugio al hampa.
El miércoles por la tarde, acudimos a un fraccionamiento en La Mesa, típico paraíso clase mediero de casas chicas habitadas por parejas jóvenes atiborradas de aspiraciones ridículas. En las calles jugaban los niños y en las puertas de las casas las doñas rumiaban el spleen de su clasemierdez. Pues bien, una de esas viviendas, concretamente la marcada con el número 7612-13, fungió durante varios meses como casa de seguridad de un grupo de secuestradores y narcotraficantes. En dicha vivienda ordinaria, promovida por alguna inmobiliaria usurera ideada por los capitalistas inmobiliarios para esclavizar con sus impagables cuotas mensuales a una pobre pareja de empleados, había un arsenal de armas de altísimo poder entre las que se podían contar los infaltables AK-47, los AR-15 , un rifle de asalto con disco calibre 45-70 capaz de atravesar blindajes y un par de pistolas nueve milímetros, además de mil cartuchos útiles, 32 paquetes de mota de a kilo cada uno y esposas, cadenas y cachiporras diversas. En esa casa estuvieron guardados al menos tres empresarios secuestrados entre diciembre de 2003 y abril de 2004. Uno de ellos, Antonio Ríos Acosta, fue asesinado. Los secuestradores fueron capturados la noche del martes tras espectacular operativo del Ejército, PFP, PGR, Siedo etc. El miércoles llegamos ahí para tomar unas fotos y hablar con los vecinos. La casa, en total abandono, no estaba acordonada, sus ventanas delanteras estaban rotas y la chapa de la puerta tronada. En el interior un sillón negro, un horno de microondas y altar de la Santísima Muerte como guardián del terruño. La Gran Señora Blanca siempre impone respeto a cualquiera. Las ventanas traseras tapadas con cinta y papeles. Al lado de la casa, habita una familia con niños chiquitos absolutamente ajena a sus traviesos vecinos. Uno nunca sabe quien vive en la casa de a lado.
Dos días después, el viernes por la mañana, acompañé a mi colega Said Betanzos (cronicaspoliciacas.blogspot.com) a la casa de seguridad del Efra y el Macumba, lugartenientes del CAF, capturados la noche anterior en medio de un show de armas largas, helicópteros, chalecos antibalas y faramalla diversa, cuyo heroico acto será atribuido por Blancornelas al siempre benemérito y abnegado Ejército Mexicano (nunca la PGR será bueno de la película, sólo los militares merecen la gloria, marca el manual de estilo de Zeta) Lo que en apariencia era un taller de carrocería y pintura como miles que hay en Tijuana, era en realidad la base de operaciones de los lugartenientes más poderosos de los aretes desde la caída de Labra y Mayel. Un vaso aún lleno de clamato, botellas de cerveza, muchos frascos de vitaminas (Noni para ser exactos) y un billete de dólar enrollado por el que hizo su viaje a la nariz el último pase de coca, son la herencia de la parranda final del Efra y el Macumba a los que sorprendieron más de cien armas largas cuando se aburrían con el 0-0 de UNAM y Cruz Azul. Las botas de cocodrilo, las camisas de seda, el altar a San Judas Tadeo, los cargadores de teléfonos celulares, las revistas pornográficas, miles de boletos y promocionales del centro de espectáculos Alamar, un ejemplar del Zeta y otro del Esto completaban el mobiliario. ¿Cuántas cosas se planearon en ese lugar? ¿De qué conversaciones fueron testigos esas paredes?
En fin, si quieren sabe más del asunto recomiendo leer cronicaspoliciacas.blogspot. com o yorsh.blogspot.com, en donde podrán ahondar en la información relativa a estos sujetos y conocer detalles que Blancornelas jamás les podrá platicar.
Por lo que a mi respecta, sólo me queda señalar que lo que me tiene en verdad intrigado es el destino del hermoso Rothwailer y su cachorrito. ¿Alguien quiere adoptar al perrito de los Arellano?