Cristian Death
Hace doce años me presentaron a un creativo e inquieto joven ensenadense
llamado Cristian Vázquez. El chico no tenía entonces más de 19 años y todo él
era un huracán de proyectos e iniciativas. Le gustaba muchísimo la literatura y
ese fue nuestro vínculo, pues era un apasionado promotor de la lectura desde la
temprana adolescencia. Cristian había fundado un grupo llamado Pluma Joven y
con mucho más entusiasmo que presupuesto, organizaba exitosamente el Libro Fest
en Ensenada. Me invitó a participar en la edición de 2013 y recuerdo la grata
sorpresa que fue encontrar a decenas de adolescentes hurgando entre libros
antiguos e interactuando con interesantes preguntas durante mi charla, que
según recuerdo fue una presentación de Réquiem por Gutenberg. Impartí talleres
con su grupo al menos en un par de ocasiones más y también me invitó a fungir
como jurado en un certamen de ensayo joven que organizó. Después en 2015 me
invitó a dar una conferencia en su evento Elige, donde también participaron
Luis Felipe Lomelí y Balam Rodrigo. Sin ganar dinero por ello y sin pertenecer
a ninguna institución, Cristian resultó ser un promotor cultural mucho más
eficiente y activo que muchos funcionarios del aparato cultural oficial.
Después a Cristian le dio por el activismo político. Contra todo
pronóstico, logró convertirse en el primer regidor independiente de la historia
del Ayuntamiento de Ensenada. Se volvió un activista cada vez más combativo. Lo
dejé de ver hace años, pero solíamos platicar cada cierto tiempo por redes
sociales, siempre de literatura y nunca de política. Reviso mi Messenger y
reparo en que la última vez que me escribió fue en marzo de 2022 para
preguntarme si tenía ejemplares del Whisky malo.
Este mediodía mi amigo Gerardo Ortega me dio la tristísima noticia:
Cristian Vázquez fue acribillado mientras hacía ejercicio en un parque de
Tecate. Al menos siete balazos dispararon los asesinos. Su prematura partida
realmente me pone triste. No me pregunten hipótesis o conjeturas sobre el móvil
del crimen. No tengo idea. De política jamás hablamos y hasta hoy me vengo a
enterar que trabajaba con el alcalde de Tecate. A mí el tema político me vale
madre.
Lo único que sé es que Cristian, al igual que yo, amaba los libros, pero
él además tenía el don de saber contagiar el amor por la lectura y fue el
responsable de inducir a cientos de jóvenes a navegar por la vida a bordo de
barcos de papel y tinta.
En uno de esos barcos te has ido navegando colega y mi única certidumbre
es que allá donde andes vas a esperarnos con los libros abiertos.