Buscando la vida más allá de la muerte entre la cruz gamada y una araña violinista
El Jack Daniels drena a raudales.
War, Waaaarrr, fucking bloody Waaaarrrr!!!!
Ahora el campo de batalla es tu hígado,
ese órgano que ha tenido que repararse a sí mismo infinitas veces hasta formar
lacerantes tejidos de cicatrización. Hinchada está tu cara, amarillenta tu piel
y los mazazos de somnolencia te derrumban de la nada.
Vuelves a beber. El Jack es un torrente
sobre úlceras. Hace tiempo que has dejado de tener hambre y tu vida es una
eterna borrachera solitaria.
Hell awaits. El infierno aguardó mucho
tiempo pero ya está aquí y yace en tu hígado. La autopista acaba en la vía
muerta de un hospital a donde te han conducido tus hemorragias internas.
¿Improvisaste algún riff en tus días finales o el dolor te lo impidió? ¿Hubo
últimas palabras o habré de inventarlas? ¿Cómo es la música de tu muerte? ¿Se
parece a los siniestros tambores y la lluvia del Reign in Blood o es solo el
lacerante silencio de la nada?
War, Waaar, Waaaaar. El grito primario y el estertor final
que nos retorna a la esencia animal.
Buscando la vida más allá de la muerte
entre la cruz gamada y una araña violinista.
War
War…
waaaar…
waaar..
war…
wa…
w