Desentrañarlos es una especie de ceremonia pagana, un rito con algo de voyerismo
De todos los aquelarres culturales que se
celebran en la región, este es sin duda el que más disfruto y el que quiero
más. La Feria del Libro Antiguo me parece la fiesta libresca más entrañable,
más auténtica y más
noble. Además, como lector es el que
más me emociona. He comprado muchísimos más libros en esta feria que en nuestro
“gran evento libresco oficial”, que hoy es un cadáver caminante clamando por
respiración artificial. Hay una buena dosis de embrujo en la pepena de
ejemplares viejos o descatalogados, algo que difícilmente sentirás en una
librería atiborrada de novedades. ¿A qué carajos voy a una
feria donde encontraré las mismas novedades
que verás en un Sanborns o en
un aeropuerto?
En la Feria del Libro Antiguo te sumerges
en la magia de los juegos de azar. Nadie puede garantizarte el encuentro con
ese as de papel y tinta que te aguarda oculto, pero tú lo intuyes y sabes que
está ahí. En la improbabilidad y en el caos habita el encanto. Hay un libro que
te acecha desde algún escondite. Un único libro mostrenco que ha caído en esa
mesa como resultado de mil y una aleatoriedades. Un libro con un pasado
pasional a cuestas. Nunca he concebido al libro como un objeto inanimado. Los
libros, como los vinos, son entes vivos, habitados por un espíritu no siempre
descifrable. Libro-duende; libro-íncubo; libro-navaja. Tú no lo encontrarás; él
te encontrará a ti.
Al llegar te sabes acechado por ese
ejemplar capaz de volarte la cabeza, pero el encuentro bien puede no
producirse. Una mesa de libros antiguos es un paraje poblado por claves y señuelos.
Desentrañarlos es una especie de ceremonia pagana, un rito con
algo de voyerismo. Dedicatorias, nombres de antiguos propietarios, papelitos,
rayones, tarjetas, boletos, subrayados, listas de compra. En fin colegas, esta
tarde en el Callejón del Travieso inauguramos la Feria del Libro Antiguo y de
Ocasión junto con mis colegas el Grafógrafo, Paty Blake, Eric y todos ustedes. Allá
los esperamos.