Eterno Retorno

Saturday, March 19, 2022

Sin duda habrían sido acérrimos opositores de Putin si vivieran en estos tiempos

 


 

 

1-  Entre  las no pocas ridiculeces que aborrezco del espíritu de la época actual, la expresión “cancelar” es la que me parece más estúpida y detestable. Hoy a los políticamente correctos les ha dado por “cancelar” la cultura rusa, el deporte ruso, la gastronomía rusa. Caray, sin duda la paz mundial  se vio quebrantada por los vodkas que bebí anoche. A ver  colegas: la cultura de un país siempre será mucho más trascendente, duradera  e importante que su dictadorzuelo en turno. Gógol, Tolstói, Dostoievski y Chéjov seguirán siendo leídos dentro de muchísimos años, cuando del detestable Putin no quede más que un patético recuerdo. Además, no reparan en que Dostoievski, Marina Tsvietáieva, Bulgákov o Ajmátova  sin duda habrían sido acérrimos opositores de Putin si vivieran en estos tiempos, así que no los metan en el mismo saco. Por cierto, si cancelas a Gógol, Bulgákov o Ajmátova estás cancelando a escritores nacidos en Ucrania. Pd- A menudo cuando pensamos en literatura rusa nos limitamos a su prolífico Siglo XIX, pero poco hablamos de Vladimir Makanin, matemático de formación militar nacido en los Urales en 1937 cuya novela Asán, un clásico de la Rusia postsoviética,  narra con crudeza y desparpajo la guerra en Chechenia. Makanin murió en 2017 y en verdad me habría gustado leer cómo retrataría la guerra en Ucrania.

2-  De acuerdo, jamás me verás cayendo en esa ridiculez de “cancelar” la cultura rusa, pero más ridículo me parece el aferre de la piara chaira de hacerle el juego a Putin. En su afán de supuestamente  desenmascarar la hipocresía de la OTAN y la información manipulada del bloque occidental, acaban convirtiéndose en apologistas de la invasión argumentando que los “nazis ucranianos del comediante Zelensky tenían aterrorizados a los pobres rusos del Donbás”. Yo no sé si es una trasnochada nostalgia bolchevique o una ilusa esperanza de revivir el bloque eslavo socialista, pero en verdad se ven patéticos dándole por su lado a un dictadorcete. Que Zelensky está haciendo su juego y administrando su teatro a conveniencia es muy posible, pero me la pongas como me la pongas,  la invasión a Ucrania no es defendible ni justificable desde ningún punto de vista y aquí no caben relativismos ni asegunes y ustedes se ven muy mal como apologistas de esta carnicería.  No se hagan bolas mis chairetes: Putin no es ni será nunca un abanderado de la izquierda. Es un mojigato ortodoxo ultraconservador y homófobo que deberá ser juzgado como el criminal de guerra que es.

3-  Me da mucha risa cada que escucho a la chairada teorreica perorando la muerte o la agonía del neoliberalismo. No mis galeanitos, yo a su demonio favorito lo veo respirar con muy buena salud. Esta guerra no la van a ganar las armas sino la macroeconomía global, esa a la que ustedes consideran culpable de todos nuestros males. Hace un siglo este conflicto se habría traducido en trincheras y baño de sangre  por toda Europa, pero hoy será la macroeconomía la que le tuerza el brazo a Putin y lo ponga de rodillas. Ni toda su testosterona de machito alfa la bastará al dictadorzuelo si las fuerzas del neoliberalismo y las finanzas globales lo acorralan y lo convierten en un paria. Puedes intentar resistir Vladimir, pero tarde o temprano acabarás como un Corea del Norte y antes de que eso suceda, el mismo pueblo ruso te derrocará. Tal vez el neoliberalismo ha dejado unos cuantos damnificados alrededor del mundo, pero al final del cuento su saldo es más positivo que negativo y hoy seráN las finanzas y no las bombas las que inclinen la balanza en esta guerra a favor de OTAN y las democracias liberales. Sad but true mis galeanitos.