Eterno Retorno

Friday, March 18, 2022

La rueda de la fortuna

 


La rueda de la fortuna de la política suele ser muy ingrata y gira muy rápidamente. Hoy que el ex gobernador de Nuevo León Jaime  Rodríguez Calderón ha caído en desgracia luciendo el uniforme de pants gris en el penal que él mismo construyó, pocos parecen recordar cuando hace no mucho era la máxima estrella de la política nacional. Tal vez los que tengan memoria recuerden que el Bronco vino de gira a Baja California en calidad de súper rockstar en el verano de 2015, cuando acababa de ganar la gubernatura, en donde ofreció una conferencia-espectáculo en el Club Campestre con boleto pagado y otra con casa llena en Cetys Universidad. Dado que su publicista estrella fue el mexicalense Memo Rentería, el Bronco entró en conexión directa con no pocos políticos bajacalifornianos que soñaban con ser candidatos independientes con los cuales compartió una informal asesoría. Aún recuerdo cuando en casa de Praxedis Padilla, el Bronco  fue agasajado por la casta política y empresarial bajacaliforniana en una comida donde estuvieron, entre otros, el teniente coronel Julián Leyzaola, Gastón Luken, Carolina Aubanel, Héctor Osuna Jaime, José Galicot, Juan Manuel Hernández Niebla y otros muchos. Nadie me lo platicó: yo estuve ahí y tomé las fotos que aquí comparto. Eran los tiempos en que se daba por hecho que en 2016 habría una fuerte e imbatible  candidatura independiente   a la alcaldía de Tijuana que acabaría con el PRI y el PAN y el Bronco predicaba como una suerte de sumo sacerdote de la nueva independencia. El mundo ha cambiado mucho desde entonces y ya nadie parece acordarse de aquel con quien hacían fila para tomarse la selfie y presumir su amistad. Me da tristeza el destino de Jaime, porque como persona me cae muy bien y su trato conmigo, durante las semanas en que conviví con él cuando estaba en los cuernos de la luna, siempre fue amable y respetuoso con mi trabajo. Su pecado y su perdición fue creerse presidenciable y obsesionarse con el 2018 antes de tomar posesión como gobernador. Debió concentrar todas sus energías en ser el mejor gobernador de Nuevo León, pero el canto de las sirenas lo hizo extraviar el barco. No olviden nunca lo caprichosa e impredecible que es la rueda de la fortuna de la política y acuérdense de mí cuando muchos de los que hoy por conveniencia navegan en la nave morenista, saltarán más temprano que tarde del barco y negarán a su caudillo cuando caiga en desgracia. Tiempo al tiempo.