Eterno Retorno

Wednesday, February 05, 2003


Los días que más blogueo son los de más intenso trabajo. Los días de descanso me alejo involuntariamente de este vicio. Tal vez el blog es el antídoto contra el trabajo. O más bien dicho el antídoto perfecto contra el tipo de trabajo que desempeño, llamado periodismo. Cuando ya llevo casi una hora desparramando grilla y calumniaje polako, no hay nada mejor que sumergirse en un blog al azar o simplemente postear algo. Por alguna razón, esos posts son increiblemente largos. Lo cierto es que los blogs me liberan momentáneamente del cáncer periodístico. Como analgésicos son muy efectivos contra todo tipo de estrés o tensión. Tal vez debería llevar la lap top encendida en el carro y ponerme a bloguear cuando el tráfico se pone denso. Sería la mejor manera de cojurar al eterno caos vial. Es más ¿Que tal sería bloguear en la línea?