Eterno Retorno

Monday, March 03, 2003


Nuestros fines de semana son escapistas y sumamente irreales. En algún momento se hablan de tu con el Carpe Diem. Pe-ro el lunes vuelve irremediablemente a zarandearnos. La misión de la vida debe ser prolongar hasta donde sea posible el más irresponsable de los hedonismos. Nunca como en estas horas veo tan claro el absoluto absurdo y la inutilidad de esta profe-sión periodística.

Pero después de leer el primer capítulo de El Mito de Sísifo ¿Sería lógico que considerase a algún aspecto de la vida libre de la carga absurda? No suelo comprar libros en lunes, pero tenía una deuda pendiente con Camus. Un libro nuevo, aun cuan-do tengo una fila de 10 por leer, siempre hará más llevadero el infierno.
Sospecho que es un libro que no me será indiferente. Algo de huella me dejará. El mito de Sísifo es una metáfora muy so-corrida por mi. Es sin duda el pasaje mitológico que más invoco en mis conversaciones.
De Camus he leído más literatura que ensayo. El extranjero cayó en mis manos a los 17 años y a los 20, mientras atendía la Librería Castillo de la Plaza San Agustín, devoré una a una las ratas muertas que infestan La peste.
La vida es absurda, sí, pero eso no significa que no merezca la pena ser vivida. Uno puede estar bien contentote disfrutando del absurdo y tener plena conciencia de eso. Eso es el Carpe Diem absoluto. Una especie de No Future socarrón.