Opera
Mentiría si digo que poseo al menos mínimas bases para opinar de opera. Luego entonces, mi criterio se basa únicamente en el puro y natural sentimiento de goce que da escuchar la música adecuada, en el momento preciso en que tus sentidos están listos para dejarse contagiar por su vibra.
Lo que más disfruté de Opera en la Calle fue su buena dosis de espontaneidad. Sí, algunos le podrían llamar defectos de organización, pero ello precisamente enriquece a este festival, pues queda claro que no hubo grandes empresas atrás de él que se encargaran de la logística y todo eso, sino únicamente gente realmente aficionada que hizo lo mejor posible para hacer un buen festival. No tengo fundamentos técnicos para hablar de sopranos, tenores y barítonos. Lo que escuché me gustó. Me quedo gratamente impresionado por el tenor Ignacio Clapés y por Marco Antonio Labastida. Gran vibra la que transmite la Colonia Libertad.
Realmente parece difícil creer que en Tijuana haya tantas personas con voces privilegiadas. Opera en la Calle me demostró una vez más como los géneros artísticos y musicales que no gozan del apoyo de los medios comerciales, pueden respirar con sus propias branquias y brillar con luz propia cuando se lo proponen. Y mientras el ambiente de Chafarotti en la Salada fue snobismo, mamonería y pretensiones de VIP para ver un cantante en decadencia, Opera en la Calle fue un ritual de amor al arte, que jamás se peleó con la calidad.
Camilo Sesto
La música de Camilo Sesto me recuerda a mi abuela. Hay canciones capaces de tocar cierta penumbra de la nostalgia en el momento preciso. Dicen que aquello que habita en el subconsciente no muere jamás y puede brotar de nuestras profundidades interiores en el momento en que alguien toca esa fibra.
Antecedido por dos excelentes vinos, cortesía de PG Beas, Camilo Sesto tuvo a bien treparme a una máquina del tiempo para llevarme a los más tempraneros ayeres de mi primera infancia, allá en la Calle Río San Juan, 103, Colonia Miravalle.
Sepultura
Sepultura dejó de existir un 16 de diciembre de 1996, en la Brixton Academy de Londres. Fue ahí donde esta mítica banda recetó su último concierto con Max Cavalera en la voz. Y qué concierto mi buen. Pocos grupos han perdido tanto con la salida de su vocalista. Sepultura después de Max no existió más (con perdón del negrito Derek). Los dos salieron perdiendo horriblemente, pues Soulfly jamás llegó ni llegará a los terrenos míticos que alcanzó Sepultura. Recuerdo la noche del 7 de diciembre de 1991, la Arena López Mateos de Tlanepantla atiborrada de melenas y camisas negras listas para recibir a la mejor banda de metal extremo del momento: Sepultura en plena gira del Arise. Vaya energía, vaya vibra, escuchar Beneath The Remains, Dead Embryonic Cells, Orgasmatron y Arise con todo el coraje y el odio que cargaba a mis 17 años. Dos días después, los brasileños fueron a dar autógrafos a la tienda de discos donde yo laboraba. Aún tengo mis fotos con el Max, el Andreas y el Igor. Para mi el inicio de los 90 fue de Sepultura. Creo que por esos años escuché más a los paulistas que a los mismísimos Slayer y Metallica. Ahora en mis audífonos me receto es último concierto en Londres, adquirido en la tienda de PS Garcia. Gran cierre con ese monumental cover de Motörhead Orgasmatron, con el que cerraron el concierto en Tlane, ahora mismo en mis oídos.
Brasil
Brasil es sin duda el país de América en donde la Iglesia del Metal tiene más adeptos. En esta enorme nación sudamericana aún hay hordas de melenudos que vibran con el metal más clásico. Sin duda Sepultura ha sido la banda brasileña más trascendente de la historia, pero no la única. A Sepultura le antecedieron los blasfemos blackmetaleros de Sarcófago y los hardcoreros de Ratos do Porao. Hoy en día los deathmetaleros extremos de Krisun y los virtuosos casi progresivos de Angra y Shaman levantan en alto la bandera de Orden y Progreso.
Los brasileños, al igual que yo, saben gozar del buen futbol y del buen metal.
Como dato adicional diré que los hermanos Cavalera son fanáticos del Palmeiras, mientras que Andreas y Paulo son hinchas del Sao Paulo.
En su más reciente concierto en Brasil, donde son auténticos ídolos, los cinco integrantes de Primal Fear salieron a tocar cada uno con una camiseta de algún equipo de Sao Paulo (Palmeiras, Corinthians, Portuguesa, Sao Paulo y Santos)
En su última aparición en Río Iron Maiden acudieron como invitados especiales al estadio Maracaná a presenciar un partido del Vasco de Gama con la Torcida radical de este equipo.
Los torcedores de Vasco da Gama sacaron una enorme bandera monumental en la que aparecía Eddie (la calaca de Maiden para los no conocedores) vestido con el uniforme de la franja negra y el barquito.
Nadie me preguntó, nadie me dijo que lo contestara, pero yo me meto donde no me importa por primera vez incluiré en Eterno Retorno uno de esos cuestionarios tan populares entre la blogósfera.
Tres cosas que me asustan
- La vejez
- La mala salud
- Los empresarios capitalistas con mentalidad de M.A Cornejo
Tres personas que me hacen reír
- El blog del Chango 100
- Los libros de Nachón y de Vallejo
- La carrilla pesada de los colegas de la Redacción (mención honorífica Neto Álvarez)
Tres cosas que me gustan
- Sexo
- Vino
- Mar
- Libros
- Metal
- Futbol y chale, ya me pasé
Tres cosas que no me gustan
- Ser despertado luego de batallar un chingo para conciliar el sueño
- El tráfico de la 5 y 10 y la Internacional
- El rap, el hip hop y toda la basura negra
Tres cosas que no entiendo
- La gente que cree en los manuales baratos de calidad empresarial
- Las computadoras (les entiendo el 15%)
- La fascinación de la banda bloguera por el Zacaz.
Tres cosas en mi escritorio
Libros, libros, libros.
Fotos de Carolina y mías
Periódicos viejos y documentos que en su momento fueron reveladores.
Tres cosas que hago en este momento
Contestar un test estúpido que nadie me pidió contestar
Escuchando Sepultura en los audífonos
Terminando un reportaje de empresas piratas de seguridad
Tres cosas que quiero hacer antes de morir
Ir a Praga
Ir a Buenos Aires (concretamente a la Bombonera de Boca)
Recorrer los cinco países de Escandinavia
Tres cosas que puedo hacer
Hacerme pendejo
Acabar de escribir más temprano que todos
Moderar debates
Tres cosas que no puedo hacer
Aprender cómo chingados se suben fotos al blog
Terminar mis reportajes con tiempo de sobra
Leer un solo libro a la vez
Tres cosas que deberías escuchar
Toda la discografía de Black Sabbath y Iron Maiden (y mi nuevo disco de Sepultura)
Todas las canciones de Piporro
Los sonidos del silencio en un atardecer frente al Pacífico.
Tres cosas que NO deberías escuchar
El rap y la música de negros
La música sinaloense
Los discursos de los candidatos de cualquier partido
Tres de las cosas que digo más
Pegándole duro, tirando trancazos (cuando me preguntan qué he hecho)
Mire usted, voy a sacar para mañana una nota que lo involucra y mi Código de Ética me exige que...
ARRIBA LOS TIGRES
Tres cosas que te gustaría aprender
Todo lo referente a las computadoras
A tomar fotos más chingonas
A quedarme dormido con facilidad
Tres bebidas que consumas regularmente
Vino tinto
Cerveza (Tijuana, Heineken, Guiness etc)
Café
Tres programas que veías cuando niño
Reino Salvaje
El Chavo
La serie animada de Don Quijote
Tres películas que recomiendes
Sur
Señor de los Anillos (Toda la trilogía)
Ojos bien cerrados (la escena de la misa negra)
Tres lugares donde hayas tenido sexo
Un avión transatlántico (si por sexo se entiende orgasmo compartido)
En el monte vil
En una alberca
Tres pasatiempos favoritos
Estar con mi mujer (y todo lo que de ahí se deriva)
Leer, beber vino y escuchar metal (al mismo tiempo)
Bloguear
Tres canciones que te ponen en ambiente
Number of The Beast (Iron Maiden)
Sabbath, Bloddy Sabbath (Black Sabbath)
Natalio Reyes Colás (Piporro)
Tres pecadillos
Robar libros
Molestar a Morris hasta hacerlo rabiar
Reciclar reportajes cada cierto tiempo
Tres logros
Ganar la quiniela de la Eurocopa con Grecia
Ganar el premio de periodismo Tijuana para donarlo a la Cruz Roja
Ganar un chingo de concursos de oratoria
Tres aromas que disfrutes
El olor del mar
El aroma del vino recién descorchado
El olor de la piel de la mujer amada
Tres títulos para la novela de tu vida
Odiando a Dios en Tijuana
Daxdalia
¿Dónde es el reventón?
Mentiría si digo que poseo al menos mínimas bases para opinar de opera. Luego entonces, mi criterio se basa únicamente en el puro y natural sentimiento de goce que da escuchar la música adecuada, en el momento preciso en que tus sentidos están listos para dejarse contagiar por su vibra.
Lo que más disfruté de Opera en la Calle fue su buena dosis de espontaneidad. Sí, algunos le podrían llamar defectos de organización, pero ello precisamente enriquece a este festival, pues queda claro que no hubo grandes empresas atrás de él que se encargaran de la logística y todo eso, sino únicamente gente realmente aficionada que hizo lo mejor posible para hacer un buen festival. No tengo fundamentos técnicos para hablar de sopranos, tenores y barítonos. Lo que escuché me gustó. Me quedo gratamente impresionado por el tenor Ignacio Clapés y por Marco Antonio Labastida. Gran vibra la que transmite la Colonia Libertad.
Realmente parece difícil creer que en Tijuana haya tantas personas con voces privilegiadas. Opera en la Calle me demostró una vez más como los géneros artísticos y musicales que no gozan del apoyo de los medios comerciales, pueden respirar con sus propias branquias y brillar con luz propia cuando se lo proponen. Y mientras el ambiente de Chafarotti en la Salada fue snobismo, mamonería y pretensiones de VIP para ver un cantante en decadencia, Opera en la Calle fue un ritual de amor al arte, que jamás se peleó con la calidad.
Camilo Sesto
La música de Camilo Sesto me recuerda a mi abuela. Hay canciones capaces de tocar cierta penumbra de la nostalgia en el momento preciso. Dicen que aquello que habita en el subconsciente no muere jamás y puede brotar de nuestras profundidades interiores en el momento en que alguien toca esa fibra.
Antecedido por dos excelentes vinos, cortesía de PG Beas, Camilo Sesto tuvo a bien treparme a una máquina del tiempo para llevarme a los más tempraneros ayeres de mi primera infancia, allá en la Calle Río San Juan, 103, Colonia Miravalle.
Sepultura
Sepultura dejó de existir un 16 de diciembre de 1996, en la Brixton Academy de Londres. Fue ahí donde esta mítica banda recetó su último concierto con Max Cavalera en la voz. Y qué concierto mi buen. Pocos grupos han perdido tanto con la salida de su vocalista. Sepultura después de Max no existió más (con perdón del negrito Derek). Los dos salieron perdiendo horriblemente, pues Soulfly jamás llegó ni llegará a los terrenos míticos que alcanzó Sepultura. Recuerdo la noche del 7 de diciembre de 1991, la Arena López Mateos de Tlanepantla atiborrada de melenas y camisas negras listas para recibir a la mejor banda de metal extremo del momento: Sepultura en plena gira del Arise. Vaya energía, vaya vibra, escuchar Beneath The Remains, Dead Embryonic Cells, Orgasmatron y Arise con todo el coraje y el odio que cargaba a mis 17 años. Dos días después, los brasileños fueron a dar autógrafos a la tienda de discos donde yo laboraba. Aún tengo mis fotos con el Max, el Andreas y el Igor. Para mi el inicio de los 90 fue de Sepultura. Creo que por esos años escuché más a los paulistas que a los mismísimos Slayer y Metallica. Ahora en mis audífonos me receto es último concierto en Londres, adquirido en la tienda de PS Garcia. Gran cierre con ese monumental cover de Motörhead Orgasmatron, con el que cerraron el concierto en Tlane, ahora mismo en mis oídos.
Brasil
Brasil es sin duda el país de América en donde la Iglesia del Metal tiene más adeptos. En esta enorme nación sudamericana aún hay hordas de melenudos que vibran con el metal más clásico. Sin duda Sepultura ha sido la banda brasileña más trascendente de la historia, pero no la única. A Sepultura le antecedieron los blasfemos blackmetaleros de Sarcófago y los hardcoreros de Ratos do Porao. Hoy en día los deathmetaleros extremos de Krisun y los virtuosos casi progresivos de Angra y Shaman levantan en alto la bandera de Orden y Progreso.
Los brasileños, al igual que yo, saben gozar del buen futbol y del buen metal.
Como dato adicional diré que los hermanos Cavalera son fanáticos del Palmeiras, mientras que Andreas y Paulo son hinchas del Sao Paulo.
En su más reciente concierto en Brasil, donde son auténticos ídolos, los cinco integrantes de Primal Fear salieron a tocar cada uno con una camiseta de algún equipo de Sao Paulo (Palmeiras, Corinthians, Portuguesa, Sao Paulo y Santos)
En su última aparición en Río Iron Maiden acudieron como invitados especiales al estadio Maracaná a presenciar un partido del Vasco de Gama con la Torcida radical de este equipo.
Los torcedores de Vasco da Gama sacaron una enorme bandera monumental en la que aparecía Eddie (la calaca de Maiden para los no conocedores) vestido con el uniforme de la franja negra y el barquito.
Nadie me preguntó, nadie me dijo que lo contestara, pero yo me meto donde no me importa por primera vez incluiré en Eterno Retorno uno de esos cuestionarios tan populares entre la blogósfera.
Tres cosas que me asustan
- La vejez
- La mala salud
- Los empresarios capitalistas con mentalidad de M.A Cornejo
Tres personas que me hacen reír
- El blog del Chango 100
- Los libros de Nachón y de Vallejo
- La carrilla pesada de los colegas de la Redacción (mención honorífica Neto Álvarez)
Tres cosas que me gustan
- Sexo
- Vino
- Mar
- Libros
- Metal
- Futbol y chale, ya me pasé
Tres cosas que no me gustan
- Ser despertado luego de batallar un chingo para conciliar el sueño
- El tráfico de la 5 y 10 y la Internacional
- El rap, el hip hop y toda la basura negra
Tres cosas que no entiendo
- La gente que cree en los manuales baratos de calidad empresarial
- Las computadoras (les entiendo el 15%)
- La fascinación de la banda bloguera por el Zacaz.
Tres cosas en mi escritorio
Libros, libros, libros.
Fotos de Carolina y mías
Periódicos viejos y documentos que en su momento fueron reveladores.
Tres cosas que hago en este momento
Contestar un test estúpido que nadie me pidió contestar
Escuchando Sepultura en los audífonos
Terminando un reportaje de empresas piratas de seguridad
Tres cosas que quiero hacer antes de morir
Ir a Praga
Ir a Buenos Aires (concretamente a la Bombonera de Boca)
Recorrer los cinco países de Escandinavia
Tres cosas que puedo hacer
Hacerme pendejo
Acabar de escribir más temprano que todos
Moderar debates
Tres cosas que no puedo hacer
Aprender cómo chingados se suben fotos al blog
Terminar mis reportajes con tiempo de sobra
Leer un solo libro a la vez
Tres cosas que deberías escuchar
Toda la discografía de Black Sabbath y Iron Maiden (y mi nuevo disco de Sepultura)
Todas las canciones de Piporro
Los sonidos del silencio en un atardecer frente al Pacífico.
Tres cosas que NO deberías escuchar
El rap y la música de negros
La música sinaloense
Los discursos de los candidatos de cualquier partido
Tres de las cosas que digo más
Pegándole duro, tirando trancazos (cuando me preguntan qué he hecho)
Mire usted, voy a sacar para mañana una nota que lo involucra y mi Código de Ética me exige que...
ARRIBA LOS TIGRES
Tres cosas que te gustaría aprender
Todo lo referente a las computadoras
A tomar fotos más chingonas
A quedarme dormido con facilidad
Tres bebidas que consumas regularmente
Vino tinto
Cerveza (Tijuana, Heineken, Guiness etc)
Café
Tres programas que veías cuando niño
Reino Salvaje
El Chavo
La serie animada de Don Quijote
Tres películas que recomiendes
Sur
Señor de los Anillos (Toda la trilogía)
Ojos bien cerrados (la escena de la misa negra)
Tres lugares donde hayas tenido sexo
Un avión transatlántico (si por sexo se entiende orgasmo compartido)
En el monte vil
En una alberca
Tres pasatiempos favoritos
Estar con mi mujer (y todo lo que de ahí se deriva)
Leer, beber vino y escuchar metal (al mismo tiempo)
Bloguear
Tres canciones que te ponen en ambiente
Number of The Beast (Iron Maiden)
Sabbath, Bloddy Sabbath (Black Sabbath)
Natalio Reyes Colás (Piporro)
Tres pecadillos
Robar libros
Molestar a Morris hasta hacerlo rabiar
Reciclar reportajes cada cierto tiempo
Tres logros
Ganar la quiniela de la Eurocopa con Grecia
Ganar el premio de periodismo Tijuana para donarlo a la Cruz Roja
Ganar un chingo de concursos de oratoria
Tres aromas que disfrutes
El olor del mar
El aroma del vino recién descorchado
El olor de la piel de la mujer amada
Tres títulos para la novela de tu vida
Odiando a Dios en Tijuana
Daxdalia
¿Dónde es el reventón?